El proyecto DigesTake recuperará los nutrientes de aguas residuales para transformarlos en fertilizantes de alto valor

Les estaciones depuradoras de aguas residuales (EDAR) del futuro no solo serán instalaciones donde limpiar el agua sucia. Además de eliminar contaminantes, estas instalaciones regeneraránel agua residual para volverse a utilizar y recuperarán los nutientes para transformarlos en fertilizantes, biocombustibles o compuestos par ala industria química o farmacéutica. Por este motivo, las EDAR ya empiezan a llamarse las ´nuevas biorrefinerías´. Esta visión ya no tiene marcha atrás y está perfectamente alineada con el nuevo paradigma de economía circular que promueve la Comisión Europea para cerrar ciclos económicos mediante el ahorro de recursos y la minimización de residuos.

El proyecto DigesTake pretende aplicar estos principios a la digestión anaerobia de los fagos de EDAR urbanas. Este proceso, necesario para evitar la proliferación de basterias infecciosas y malos olores, genera tres corrientes:

• Una fase sólida, con el fango estabilizado.
• Una fase gas, formada por una mezcla de dióxido de carbono y metano.
• Una fase líquida, con un alto contenido de nutrientes (sobre todo carbono, nitrógeno, fósforo y potasio) que pueden aprovecharse para obtener fertilizantes.

DigesTake investigará, por tanto, la recuperación y valorización de recursos tanto del efluente líquido como del gaseoso. De esta forma, hará posible la conversión del dióxido de carbono del biogás en compuestos orgánicos de valor añadido por medio de sistemas bioelectroquímicos.

En cuanto a la parte líquida, el proyecto desarrollará y validará dos procesos alternativos para recuperar el fósforo en forma de fertilizante sólido a través de estruvita, uno de ellos utilizando subproductos de minería, así como un proceso de fertilizantes líquidos ricos en amonio por medio de sistemas de adsorción-desorción con zeolitas y contactores de membrana, otro proceso para eliminar el excedente de nitrógeno con bajo consumo energético en condiciones microaerófilas y, cuarto y último, nuevos procesos de ósmosis directa para regenerar agua y valorizar un concentrado único de nutrientes.

Por último, también se llevarán a cabo actividades de investigación transversales como el desarrollo de un nuevo sistema de sensores para monitorizar la concentración de compustos de fósforo o la evaluación económica y ambiental de todas las tecnologías investigadas.

El proyecto DigesTake tiene un presupusto de 2,1 millones de euros y se ejecutarça durante 3,5 años, tanto a escala laboratorio como en plantas piloto. Para alcanzar los objetivos es fundamental la colaboración público-privada, de ahí que los miembros del proyecto sean: el grup Lequia de la UdG; los grupos de investigación de procesos de separación industrial y de desarrollo y aplicación de procedimientos analíticos de la Universitat de Barcelona (UB); el grup de investigación R2EM de la Universitat Politècnica de Catalunya (UPC); los centros tecnológicos CTM, Leitat i Cetaqua (Centre Tecnològic de l’Aigua); y las empresas de los sectores del agua y de producción de fertilitzantes LEF Ingenieros, Adasa, Aquambiente (grup Suez) e Iberpotash-ICL. El consorcio también cuenta con con la Agència Catalana de l’Aigua (ACA), el Consell Comarcal del Pla de l’Estany y la empresa OMS-Sacede, como entidades colaboradoras.