¿Quién fija las condiciones de una concesión de agua?

El noveno mito de la Campaña de Aqualia sobre la información real de la gestión integral del agua gira en torno al beneficio derivado de la prestación del servicio: ¿quién define los límites del contrato? ¿busca el operador solo el beneficio económico? ¿quién lo controla?

Las condiciones en que se presta la gestión del ciclo integral del agua quedan definidas en el contrato de concesión. En él, la administración, titular del servicio (ayuntamiento o mancomunidad) fija las condiciones económico-administrativas, el periodo de la concesión, así como los deberes y límites del concesionario. El procedimiento de concesión garantiza la publicidad, la transparencia y la concurrencia competitiva para presentar la mejor oferta, lo que beneficia al municipio y al ciudadano. Que las empresas (públicas o privadas) obtengan un beneficio es legítimo y garantiza la sosteniblidad social y financiera del servicio. Estas empresas aportan valor añadido: inversiones, tecnología, I+D...

El 9º mito de la Campaña de Aqualia aclara también que los operadores no se limitan a facturar por un servicio, sino que aportan un valor añadido que se traduce en el desarrollo de nuevas infraestructuras, inversión en mejoras tecnológicas o aplicación de innovaciones en municipios de cualquier tamaño, algunos muy pequeños, que de otra manera no tendrían acceso a este tipo de prestaciones. Según el XIV Estudio Nacional de Suministro de Agua Potable y Saneamiento en España 2016 de la Asociación Española de Abastecimiento y Saneamiento (AEAS), los operadores destinan un 12,5% de la facturación a inversión en nuevas infraestructuras o equipamientos.

Esta nueva acción informativa forma parte de la Campaña lanzada por Aqualia a comienzos de este año en torno a la página web  www.informacionrealdelagua.com. En ella, se recogen 12 falsos mitos, muy populares entre los ciudadanos, que rodean a la gestión del ciclo integral del agua y se dan argumentos objetivos para desmontarlos.