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En un mundo donde la sostenibilidad hídrica es cada vez más prioritaria, digitalizar la gestión del agua ya no es una opción: es una necesidad. Kamstrup responde a este desafío con FlowIQ 2200, un contador ultrasónico inteligente que ayuda a operadores públicos y privados a reducir el agua no facturada, optimizar sus operaciones y avanzar hacia redes de suministro más eficientes y sostenibles
Tanto en pequeños municipios como en grandes ciudades, las gestoras del agua comparten tres objetivos básicos:
Para lograrlo, la digitalización es esencial. Los contadores estáticos como FlowIQ 2200 permiten detectar incidencias rápidamente, optimizar procesos y aprovechar mejor los recursos gracias a la recogida automática de datos y al control inteligente de la red.
El contador FlowIQ 2200 incorpora medición ultrasónica sin piezas móviles, telelectura automatizada y un sistema de alarmas en tiempo real que detecta fraudes, retornos de agua y fugas, incluso antes de que sean visibles. Todo esto se traduce en una red más segura, eficiente y transparente.
El paso de contadores mecánicos a estáticos es tan transformador como lo fue el salto de la máquina de escribir al ordenador. Con FlowIQ 2200, se obtienen datos de consumo precisos y seguros, se detectan fugas con rapidez y se mejora la planificación operativa. El resultado: menos costes, más control.
Más allá del coste inicial, cambiar a contadores ultrasónicos representa una inversión inteligente a largo plazo: