Idrica considera que la tecnología será clave para garantizar la seguridad hídrica tras la pandemia

El acceso al agua es fundamental, y pronto será uno de los principales indicadores del descontento social en el mundo en desarrollo. Los expertos afirman que el conflicto puede ser uno de los principales efectos de la pandemia, llegando incluso a desencadenar episodios de violencia en ciudades con inseguridad hídrica.

En este sentido, Nebot defiende que "el futuro dependerá de una buena gestión de los recursos hídricos en todo el mundo. En el éxito de ese esfuerzo juega un papel clave la etapa en la que se encuentre cada sociedad. Por eso estamos trabajando en África, Oriente Medio y América Latina, para ayudar a los operadores locales de agua a mejorar su capacidad tecnológica".

Para reforzar la capacidad de gestión en los países más afectados, Idrica ha firmado contratos en México y Qatar, a través de los cuales seguirá promoviendo su visión y su tecnología GoAigua en los mercados de América Latina y Oriente Medio. Más de 20 ciudades, con una población total de casi 10 millones de personas, ya utilizan GoAigua para supervisar y optimizar la gestión de los recursos hídricos mediante soluciones como el gemelo digital, la automatización o el sistema de alerta temprana para COVID-19. Esta tecnología ha logrado detectar brotes de coronavirus en distintas ciudades en el mundo, a través de los sistemas de saneamiento.

Con sede en Valencia, y con operaciones en Europa, Estados Unidos, Oriente Medio, África y América Latina, Idrica pretende convertirse en una empresa referente en la transformación digital del sector del agua, ofreciendo servicios y la solución tecnológica GoAigua para la gestión del ciclo integral. Durante la pandemia, la compañía impulsó los Idrica Water Security Series, una serie de encuentros digitales que reunió a los principales expertos mundiales en seguridad hídrica.